¿Cuáles son los riesgos del alargamiento óseo?
El alargamiento óseo es un procedimiento seguro y efectivo cuando se realiza con un buen seguimiento médico. Como cualquier tratamiento, puede presentar algunos desafíos, pero la mayoría de las posibles complicaciones pueden prevenirse o manejarse con los cuidados adecuados.
Durante el proceso, es posible experimentar molestias o rigidez en los músculos y articulaciones debido al estiramiento progresivo, pero esto se controla con fisioterapia y ajustes en el tratamiento. También es importante seguir las indicaciones del equipo médico para asegurar una buena regeneración ósea y evitar infecciones menores en el sitio de los dispositivos, en caso de usarse fijadores externos.